“Hay una teoría que afirma que si alguien descubriera lo que es exactamente el
Universo y el por qué de su existencia, desaparecería al instante y sería
sustituido por algo aún más extraño e inexplicable.
Hay otra teoría que afirma que eso ya ha ocurrido”
Douglas Adams 1980
“vi en el Aleph la tierra, vi mi cara y mis vísceras, vi tu cara, y sentí vértigo y
lloré, porque mis ojos habían visto ese objeto secreto y conjetural, cuyo nombre
usurpan los hombres, pero que ningún hombre ha mirado: el inconcebible
universo.”
Jorge Luis Borges (1949)
Es muy simple y complejo a la vez.
Tan simple como el TODO. Tan complejo como la NADA.
El Aleph, el Vórtice de la Perspectiva Total o Dios ( como le llaman algunos), es una simple masa de energía la cual es una pequeña puerta, falla (como dicen algunos); que permite sentir, ver, percibir a cualquiera que pueda observarlo; la INFINIDAD DEL UNIVERSO. Ver TODO. Ver NADA. Verte a vos. Ver a ella.
Todo ser humano lo experimenta, en tres fases diferentes:
*Cuando uno nace. La persona llega al mundo como un TODO, para desprenderse y ser parte de una NADA.
* Cuando uno se despierta. Cada vez que la persona llega al estado alfa, el momento en el cual la conciencia domina a la inconciencia
*Cuando uno muere. Ese es el peor. Ese es tu Juicio Final. Pasas de ser NADA a formar parte del TODO. En ese momento uno ve lo que hizo, sus consecuencias; ¿no es suficiente castigo ese?
Pero hay una fase mucho más poderosa. Y hago uso de la palabra poderosa, por el hecho de que deja vestigios , pequeñas manchas en nuestro conciente. Esta fase, que no es conocida por muchos ( en realidad casi nadie) denominada Amor.
¿Por qué no lo podemos ver? Simple. Por qué es esa la respuesta a nuestra felicidad. Es un simple mecanismo de defensa para que Universo no desaparezca como una vez lo hizo. Suena Geocéntrico, pero el ser humano tiene esa cualidad.
¿Por que estoy refiriéndome a esto?, ¿Por que hablo de esto?. Simple.
Estaba sentado tembloroso, como si una estampida marcara el ritmo de mi corazón. La toque. La sentí. Perdí noción. Reflexione sobre mi entorno. Estábamos sentados en un sucio y roto banco blanco. Niños correteando por doquier, Ancianos viviendo de sus recuerdos, pibes fumando.
No pude entenderlo, pero de repente el tiempo se detuvo. La gente desapareció de mi alrededor, pero en los ojos de ella los pude ver a cada uno, a todos las personas todos los lugares, todos los tiempos. TODO, simplemente todo. Mi cerebro se perdió en su mirada que destellaba un especie de fulgente dorado. Estrellas, universos, personas, corazones, muertes, vidas, comienzo, fin; y aquí mi capacidad de narrador se ve truncada por que no existen palabras para abarcar la infinidad.
Por un instante lo supe todo, el por qué de la vida; el por que de mi existencia, el por que de la existencia de ella. Algo tan aterrador como magnifico.
Pero ese instante se desvaneció, y en mi mente nada quedo; más un simple hormigueo en el estomago. Una simple sensación de lo que llamamos amor. Simple.
Y hablo de esto, por que yo fui el culpable. Pido perdón. Tal vez antes éramos más felices; pero simplemente no lo recuerdo.
Así fue como una vez más el universo fue sustituido por algo mucho más bizarro. Nosotros.
“Al ver sus ojos, vi el Aleph, todo se detuvo. Todo vi, todo sentí. Todo olvidé.”
Iñaki Vallok
“vi en el Aleph la tierra, vi mi cara y mis vísceras, vi tu cara, y sentí vértigo y
lloré, porque mis ojos habían visto ese objeto secreto y conjetural, cuyo nombre
usurpan los hombres, pero que ningún hombre ha mirado: el inconcebible
universo.”
Jorge Luis Borges (1949)
Es muy simple y complejo a la vez.
Tan simple como el TODO. Tan complejo como la NADA.
El Aleph, el Vórtice de la Perspectiva Total o Dios ( como le llaman algunos), es una simple masa de energía la cual es una pequeña puerta, falla (como dicen algunos); que permite sentir, ver, percibir a cualquiera que pueda observarlo; la INFINIDAD DEL UNIVERSO. Ver TODO. Ver NADA. Verte a vos. Ver a ella.
Todo ser humano lo experimenta, en tres fases diferentes:
*Cuando uno nace. La persona llega al mundo como un TODO, para desprenderse y ser parte de una NADA.
* Cuando uno se despierta. Cada vez que la persona llega al estado alfa, el momento en el cual la conciencia domina a la inconciencia
*Cuando uno muere. Ese es el peor. Ese es tu Juicio Final. Pasas de ser NADA a formar parte del TODO. En ese momento uno ve lo que hizo, sus consecuencias; ¿no es suficiente castigo ese?
Pero hay una fase mucho más poderosa. Y hago uso de la palabra poderosa, por el hecho de que deja vestigios , pequeñas manchas en nuestro conciente. Esta fase, que no es conocida por muchos ( en realidad casi nadie) denominada Amor.
¿Por qué no lo podemos ver? Simple. Por qué es esa la respuesta a nuestra felicidad. Es un simple mecanismo de defensa para que Universo no desaparezca como una vez lo hizo. Suena Geocéntrico, pero el ser humano tiene esa cualidad.
¿Por que estoy refiriéndome a esto?, ¿Por que hablo de esto?. Simple.
Estaba sentado tembloroso, como si una estampida marcara el ritmo de mi corazón. La toque. La sentí. Perdí noción. Reflexione sobre mi entorno. Estábamos sentados en un sucio y roto banco blanco. Niños correteando por doquier, Ancianos viviendo de sus recuerdos, pibes fumando.
No pude entenderlo, pero de repente el tiempo se detuvo. La gente desapareció de mi alrededor, pero en los ojos de ella los pude ver a cada uno, a todos las personas todos los lugares, todos los tiempos. TODO, simplemente todo. Mi cerebro se perdió en su mirada que destellaba un especie de fulgente dorado. Estrellas, universos, personas, corazones, muertes, vidas, comienzo, fin; y aquí mi capacidad de narrador se ve truncada por que no existen palabras para abarcar la infinidad.
Por un instante lo supe todo, el por qué de la vida; el por que de mi existencia, el por que de la existencia de ella. Algo tan aterrador como magnifico.
Pero ese instante se desvaneció, y en mi mente nada quedo; más un simple hormigueo en el estomago. Una simple sensación de lo que llamamos amor. Simple.
Y hablo de esto, por que yo fui el culpable. Pido perdón. Tal vez antes éramos más felices; pero simplemente no lo recuerdo.
Así fue como una vez más el universo fue sustituido por algo mucho más bizarro. Nosotros.
“Al ver sus ojos, vi el Aleph, todo se detuvo. Todo vi, todo sentí. Todo olvidé.”
Iñaki Vallok
7 comentarios:
Cuando la encuentres en dos meses en TU cama con TU perro, te vas a arrepentir de este post.
[Si eso ofendió tu sensibilidad, me disculpo de antemano, sólo bromeo [pero yo te lo advertí [no, en serio es joda [pero cuidá a ese canino [perdón]]]]]
Crítica constructiva: el template de tu blog me quita las ganas de leerlo. Igual, voy a hacer un esfuerzo porque me gusta.
una vez mas, sin palabras.
AH, FUE TU CULPA. TE VOY A MATAR ¿ESCUCHASTE? A-MA-TAR.
El otro día estaba ahí, sentada, y de pronto todo se volvió horroroso. "Qué bizarro" -pensé. Pero no podía hacer nada.
Aclración a) Esta historia es real. Cualquier parecido con la ficción corre por cuenta del que ha leído muchas porquerías.
Aclaración b) Bla sabe de lo que habla: éste es el tercer perro que lo engaña con su novia. Pero él sigue insistiendo en tener una mascota. Niños...
Oh, por escribir boludeces me olvidé de decirte que me parece tierno y esperanzador que hayas escrito eso. Pero ya es muy tarde; mandé el post. Qué lástima.
es increible lo dulce que podes ser sin escribir una sola palabra melosa. por supuesto que me desagrada profundamente la dogui cuya mirada destello un especie de fulgente dorado, a mi me gustaban las cosas como estaban antes.
Entiendo... Conque eso es lo que pasó... Estee... Debo pedirle perdón a ciertas personas...
Qué bello que es Amar así... Y qué terrible es la necesidad de olvidar ese sentimiento...
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